Como si se tratara de una montaña, la nieve supone para los esquiadores un elemento esencial para la práctica de su deporte favorito el esquí.
Pero todos conocemos que cuando la nieve cae en abundancia, de forma desmesurada y continuada, genera una acumulación, que en algunos casos se convierte en peligrosa por el riesgo de avalancha. Cuando esto sucede, arrasa la zona en la que se produce, destrozando todo a su paso.
Centrándome en el tema, la abundancia de información en las redes, puede provocar efectos no deseados por nosotros. Si en un primer momento el disponer de datos y toda la información accesible que necesitemos genera un efecto eufórico, cuando la misma es abundante, en ocasiones se hace difícil de gestionar, entre otros problemas, se vuelve contra el objetivo inicial que es el de interactuar con nuestros contactos.
En ocasiones el hecho de que el empleo de nuestro tiempo en saber, conocer, escribir sobre algo, se centre en su gran mayoría en la gestión de una altísima cantidad de documentos que somos capaces de encontrar, genera un efecto colateral no deseado, secundario que no es lo que pretendemos.
Con las redes nos ocurre algo parecido, cuando son tantas y se quiere participar en muchas, nos hace dispersarnos, no seguir los hilos de por dónde o hacia dónde va la conversación, y ello provoca que no hayamos gestionado bien nuestra participación en esa comunidad virtual.
Como en las montañas existen avalanchas controladas, zonas no accesibles, etc, en la networking, debemos gestionar nuestros espacios temporales, en qué momento estoy presente o activo, y físicos, porque hay ciertas comunidades que no son profesionales y tal vez no debamos conectar desde nuestro trabajo, por ejemplo.
Esa "gestión de la abundancia", expresión que me parece muy apropiada que la he conocido en el curso ENTORNOS PERSONALES DE APRENDIZAJE (PLE) PARA EL DESARROLLO PROFESIONAL DOCENTE, se convierte en una tarea imprescindible para ser más competentes y eficientes en nuestra participación activa en las redes, foros, blogs, clases, etc. En el caso de red, debemos emplear cortafuegos de la abundancia, seleccionar, suscribirnos a canales de publicación en los que queramos estar conectados, etc.
Dentro de nuestras participaciones en espacios virtuales algunas lo son lúdicas, otras son profesionales y es, en estas últimas, donde tenemos que ser más conscientes de cual es nuestra tarea de canalizadores, de transmisores con los que con nosotros enlazan.
Las herramientas que podemos emplear para nuestra tarea docente pudieran ser la de diigo y/o la feedly, además de las suscripciones RSS, que pueden convertir nuestra tarea docente en algo en lo que podamos disfrutar y hacer bien nuestro trabajo.
Las herramientas que podemos emplear para nuestra tarea docente pudieran ser la de diigo y/o la feedly, además de las suscripciones RSS, que pueden convertir nuestra tarea docente en algo en lo que podamos disfrutar y hacer bien nuestro trabajo.
Hay un par de artículos que me han ayudado a aproximar estas reflexiones y que os dejo los enlaces para que los interesados les echéis un vistazo.
